Robótica

Enfoque en la Seguridad y Reducción de Riesgos

Uno de los pilares de la robótica submarina en la acuicultura es la seguridad. Al reemplazar a buzos humanos en tareas de inspección y mantenimiento de sistemas de fondeo y balsas jaulas, los ROVs disminuyen considerablemente el riesgo asociado a la actividad manual en profundidad. Sermar ha adoptado esta tecnología no solo como una medida de seguridad, sino también como una herramienta para asegurar la integridad de las instalaciones, detectar fallos de manera temprana y evitar incidentes que pudieran afectar tanto a los trabajadores como a los ecosistemas marinos.

Al ser una industria en transición el uso de la robótica submarina está guiando a la acuicultura hacia un futuro más seguro y tecnológicamente avanzado, en el cual la protección humana, la innovación y el respeto por el medio ambiente son valores fundamentales. En este contexto, la robótica submarina no solo representa una herramienta avanzada, sino un compromiso con una acuicultura responsable y sostenible, alineada con las regulaciones nacionales y la búsqueda de soluciones que beneficien tanto a los trabajadores como al ecosistema.

Vanguardia y Cumplimiento Normativo

La implementación de la robótica submarina no es solo una cuestión de modernización tecnológica, sino también de cumplimiento de normativas vigentes, como la Resolución Exenta 1821 actualizada por la 3362, que establece exigentes estándares para los sistemas de fondeo.

Esta permite realizar las inspecciones y certificaciones necesarias con mayor precisión, garantizando que las estructuras subacuáticas cumplan con las especificaciones de seguridad y sostenibilidad requeridas. Además, los datos obtenidos por estos robots son cada vez más detallados y ayudan a asegurar que las operaciones de instalación y mantenimiento se ajusten a estas regulaciones sin comprometer la integridad de los trabajadores ni el de los ecosistemas.